viernes, 8 de febrero de 2008

La miseria indigna,
endormecido por la sabiedad del destierro.

Y se equipara en desdén, un carmesí desteñido,
ligero de ropa, al tintinear de espuelas.

1 comentario:

Lelè dijo...

ohh, sí, Zanahoria

Mmnnn, muchos gustos en común, pues.

¿Estudias cine?, ¿en dónde?


Un saludo!




(dejo mi msn: leilu02@etcetc.)